Nuna antes era Atenea. Apareció con su hermano y hermanastros tirada en el Zaudín, en mitad de un zarzal. Tenía miedo, temblaba si te acercabas y, una vez recogida, se limitó a quedarse dentro de una caseta junto con los cachorros más pequeños.
El día en que se fijaron en ella, Atenea se fue a Málaga en brazos, muerta de miedo, sin sorportar la calle, la correa, el arnés…
Ahora Atenea ya no está, ahora es Nuna, le dieron un nuevo nombre porque es una nueva perra.
Tienen miedo aún, pero con la paciencia y mimos de sus compañeros humanos, Nuna sale a la calle con arnés y correa, tiene chip y vacunas y se le olvida lo que era estar en la calle.
Enhorabuena Nuna por tu nueva vida
Os ponemos a Atenea y a Nuna, para que veáis cómo cambia un animal cuando se le quiere.
mascotomares.wordpress.com 
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